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CARTA DE ROMAIN ROLLAND
  Querido Fédor Nicolayévich Pétrov:
  Me he sentido profundamente emocionado 
por el telegrama que he recibido de la V.O.K.S con ocasión de mi 65° 
cumpleaños. Le ruego acepte y trasmita alrededor de usted mi 
reconocimiento afectuoso.
  ¡Estad seguro de ello! Con toda la 
energía que me queda- ¡y aún me queda!- defenderé la causa heroica cuya 
vanguardia es la U.R.S.S. Después del ruidoso proceso que ha puesto al 
desnudo el absceso que maduraba en el corazón de
 cierta clase intelectual que utiliza sus privilegios para traicionar al
 pueblo del Trabajo, del cual ella misma ha salido, ya no puede ningún 
intelectual honrado y lúcido permanecer neutro. ¡Con la Unión de las 
Repúblicas Socialistas Soviéticas de los Trabajadores!
  
  Por lo que a mí se refiere, no tengo que 
cambiar mucho en mi manera de pensar y proceder. Siempre he puesto al 
servicio del pueblo mis privilegios de intelectual. Desde mi juventud, 
como artista, he deseado un arte del pueblo.
 Yo he continuado la áspera crítica de Tolstoy contra la sociedad y 
contra el arte de privilegiados. Desde el principio de la guerra rompí 
con toda mi clase de intelectuales burgueses, sometidos al nacionalismo;
 rechacé el ídolo de la patria y, en los días
 más sombríos de la pelea, lancé un llamamiento de desesperación y de 
rebelión: “A los pueblos asesinados”…
  Cuando se anunció la revolución rusa, yo la saludé.
  No tengo que hacer por tanto, ningún  
esfuerzo para marchar con vosotros. El acto en virtud del cual acabo de 
romper los puentes detrás de mí sólo tiene un valor simbólico, porque, 
con o sin puentes detrás de mí, jamás vuelvo
 hacia atrás. ¡Adelante, pues, y marchemos juntos, compañeros!
  Os lo puedo decir o predecir: no estoy 
solo; muchos me seguirán en occidente. Los acontecimientos del año 
pasado han sacudido las conciencias sanas de occidente de modo mucho más
 profundo de lo que permite suponer su Prensa corrompida.
 ¡Ved, pues, en mí el anunciador de un nuevo occidente que va hacia 
vosotros!
  A todos os estrecho cordialmente la mano.
                                                                           Romain Rolland
Villenueve, Villa Olga, 3 de febrero 1931.
Breve comentario. - Esta
 emocionada carta lo escribe Romain Rolland, a raíz de la grande 
indignación que le produjera, el hecho del sabotaje de intelectuales 
burgueses organizados como
 Comité Central del Partido Industrial, al Plan Quinquenal de los 
Soviets. El contenido de la mencionada carta, prologa el libro editado 
con el título: El Sabotaje del Plan Quinquenal, y figura como autor, 
N.V.Krilenko, Procurador de la República Socialista
 Federativa Soviética de Rusia.- Editado en Madrid-España en 1931.
  Se publica esta carta atendiendo a que el pasado sirve al presente.
HFD.
26.08.19 
 
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