domingo, 17 de septiembre de 2023

LECCIONES DE UN PASADO A UN PRESENTE

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LECCIONES DE UN PASADO A UN PRESENTE

Allá, por los años de 1960-70, cada año sucedía un hecho memorable de recordar como lección y estímulo a un presente como que ha perdido el ánimo colectivo para continuar el camino de desarrollo en función del interés social.

Se trata de las grandes ferias agropecuaria y ganadero del valle de Añasmayo en la Provincia de Huaral-Lima, rodeado por las comunidades campesinas, subiendo por: San Agustín de Huayopampa, San Salvador de Pampas-La Florida, San Pedro de Pallac, San Juan Bautista de Sumbilca, San Luis de Chaupis-La Perla, San Pedro de Huandaro y San Cristóbal de Rauma.

Esta festividad productiva tuvo como centro de iniciativa la comunidad de San Agustín de Huayopampa. Su centro interno: la labor de la Escuela y la comunidad. Su gran animador: Los maestros del Valle de Añasmayo, bajo la dirección del Maestro German Caro Ríos, en ese entonces Director de la Escuela Primaria en Huayopampa.

La convocatoria productiva estaba asegurada entre comuneros y maestros. La propaganda y la agitación del trabajo creador, renovador, entre los comuneros en la labor de un mejoramiento y renovación de los sembríos y ganadería, causaban un fortalecimiento interno de las familias de cada una de las comunidades.

Tal es así, con mucha alegría se esperaba y se concurría al gran evento social a darse a conocer en las primicias de sus productos de pan llevar y ganado.

La Feria expresaba como ninguna otra actividad lo que es el “descanso recreativo o reparador”.

 La integración de las fuerzas comunales era más absoluta y superior y el beneficio reciproco. Se puede decir, sin temor a equivocarnos, que el espíritu de la Minka-Ayni-Llankay, arribaban a la feria en un solo abrazo solidario.

A modo de ejemplo que la memoria me dicta señalare que en una de esas ferias el premiado como el mejor presentador de un torito o novillo producto de un mejoramiento en el cruzamiento de raza en el ganado vacuno, correspondió a don Porfirio Rojas, natural de la comunidad de Huandaro. Lejos del orgullo de haber ganado el premio, la seguridad interna de una innovación permanente y con perspectivas futuras en lo porvenir, era superior y era lo que primaba.  

En esta acción emergente que se sembraba en aquel entonces en las comunidades, hay que valorar y seguir el ejemplo de la labor del Maestro, de La Escuela, que integraba su labor docente con la vida productiva de la comunidad.

El pasado nos interesa en la medida que sirve al presente.

Héctor Félix Damián.

10.09.23

 

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