lunes, 6 de febrero de 2017

¿Quién fue Muamar el Gadafi?




Fue el líder de la revolución del 1 de septiembre de 1969, con la que destronó al Rey Idris I de Libia, uno de los cerebros del Panarabismo, tardío, aunque lo sustituyó más tarde por un Panafricanismo, manifiestamente anti sionista, cobijó a los grupos de la OLP y ayudó a los miembros de grupos terroristas europeos como el I.R.A. o E.T.A., atacado por los Estados Unidos fue desterrado de la comunidad internacional a la que volvió como un aliado estratégico, purgando sus faltas del pasado, pero que irremediablemente fue traicionado y asesinado por un complot de Estados Unidos y Francia detrás de esa cortina de humo llamada “Primavera Árabe.
Después de destronar al Rey Idris I se inició el proceso por el cual Muamar el Gadafi pondría a disposición del pueblo los beneficios de la explotación de la riqueza natural de Libia, en el interior del país se establecido la persecución de la oposición hacia sus políticas, aunque la oposición era mínima debido al desarrollo económico del pueblo libio.
En la política exterior debemos unir su Panarabismo con el enfrentamiento abierto a Estados Unidos debido a la oposición que Gadafi ejercía sobre la influencia de este país, llegando a estrechar lazos con otros países árabes para realizar políticas comunes de rechazo de las políticas de Washington.
En este momento las relaciones entre Gadafi y Gamal Abdel Nasser de Egipto, Mohamed V y después Hasán II de Marruecos así como con Yasser Arafat o Hafez al Asad, le llevaran a cultivar una extensa red de contactos e influencia incómoda para Europa y Estados Unidos. Francia, que siempre vio un enemigo claro en la Libia de Gadafi, no dudó en intervenir cuando estalló la guerra entre Libia y Chad, apoyando a este segundo país.
Su gran error, e inicio de su gran aislamiento internacional, llegará con el atentado de Lockerbie (en el cual a Gadafi se le implicó), en ese momento comenzó una campaña de aislamiento internacional que no era excesivamente duro debido a las buenas relaciones con el bloque socialista, sin embargo la caída de este bloque debilitó las posiciones de Libia durante la década de los noventa, aunque no afectó especialmente al pueblo libio.
Durante los noventa Gadafi, que ya había pasado a un segundo plano, se dedicará a iniciar nuevos trazos en la política exterior atendiendo a la realidad internacional, en primer lugar tomará nota del destino de Sadam Husein y del auge del islamismo, que se convertirá en la nueva gran ideología del mundo árabe, frente al fracasado panarabismo se desarrollará el panislamismo (que dará lugar a Al Qaeda y más tarde al Estado Islámico), y en paralelo se desarrollará un aumento de nacionalismos localistas que desecharán la idea de la Unión Árabe.
La preocupación de la Unión Europea por la inmigración masiva de africanos dará a Gadafi una de sus grandes oportunidades para estrechar lazos con Occidente y salir del aislamiento internacional, se convertiría en el guardián de las fronteras de Europa conteniendo a los inmigrantes ilegales que desde el África negra intentan llegar a Europa atravesando su extenso territorio.
En segundo lugar colaborará en la lucha internacional contra el terrorismo yihadista, de la que siempre renegó, si bien estuvo vinculado con grupos terroristas secesionistas y de corte socialista jamás se vinculó a grupos de corte islamista.
Obviamente esta colaboración con Occidente hizo que Libia se convirtiera en un país “amigo” de Occidente y en un lugar muy apetitoso para hacer negocios aprovechando el fin del aislamiento. Todo un país estaba a disposición de las grandes compañías internacionales y no era raro verle visitar, acompañado por su guardia femenina, las capitales de los países más importantes del mundo, siempre con su jaima, en la cual cerraba grandes y apetitosos negocios.

Gadafi se vuelve incómodo

La cantidad de dinero que Muamar el Gadafi invirtió en Occidente, entre otras cosas financió la campaña electoral de Nicolás Sarkozy para llegar a la Presidencia de Francia, dejó miles de millones de dólares en bancos europeos, pero de nuevo Gadafi tomó posiciones a favor del pueblo y comenzó a criticar el sistema capitalista internacional y las políticas de la Unión Europea y de Estados Unidos de forma abierta.
En el año 2011, en la Asamblea General de la ONU dio un discurso sobre las políticas occidentales que según muchas personas, sellaron su futuro.
El discurso que pudo condenar a muerte a Gadafi

Primavera Árabe

La Primavera Árabe ha sido una de las experiencias más brutales que ha vivido el mundo árabe-islámico en toda su historia, toda una serie de revoluciones que comenzaron en Túnez, hicieron arder el norte de África y Oriente Medio afectando, sobre todo, a Libia, Siria, Iraq y Yemen.
Occidente no dudó en apoyar a los “opositores” o “rebeldes” a los gobiernos de los países árabes, aunque después se supo que estos “rebeldes” no eran sino las marcas blancas de toda una serie de grupos terroristas vinculados a Arabia Saudí, Israel o Estados Unidos a través de grupos terroristas como Al Qaeda, principalmente, y su nueva construcción yihadista, Estado Islámico.
La revolución en Libia generó pingües beneficios en occidente, de entrada con el bloqueo y confiscación de todos los bienes y dinero (hablamos de miles de millones) depositados en los bancos de Europa y Estados Unidos, dinero que fue a parar a los bolsillos de los estados o de otras entidades o personas, al mismo tiempo que una Libia destruida y un Gadafi muerto jamás reclamarían las deudas multimillonarias que se habían contraído con ellos.
Al mismo tiempo debemos hablar del petroleo Libio, uno de los que mejor calidad posee debido a que es tan puro y posee tan poca escoria que es muy fácil de refinar y por ende es mucho más barato. Existen mares de ese petróleo bajo las arenas del desierto de Libia.
Durante la “revolución”, que se convirtió en guerra civil. Los rebeldes libios estaban situados en la ciudad de Benghazi, donde habían establecido la capital. La comunidad internacional ya había empezado a sancionar al país y saquear las riquezas que ingenuamente Gadafi había depositado fuera de la seguridad de su estado.
La OTAN, y especialmente Francia, no dudaron en intervenir en contra del gobierno de Gadafi y a favor de los rebeldes, ello implicó asegurar a Rusia (un gran aliado de Libia) que mantendría sus prebendas en suelo Libio a cambio de votar a favor de la intervención en el Consejo de Seguridad de la ONU, Vlamidir Putin accedió pero, también, fue engañado ya que no se respetaron los acuerdos rusos, que perdió un gran aliado y ganó suficiente experiencia para negar categóricamente todas las ofertas que Estados Unidos le ha hecho a Moscú sobre Siria, sabiendo que Occidente jamás respetará los acuerdos que firma.
(Pincha aquí para saber más sobre las relaciones Rusia-Libia)
La OTAN, que estableció la exclusión aérea, no dudó en acabar con el ejercito libio bombardeando sus bases, arsenales e incluso barrios residenciales. Paralelamente a esto los medios de comunicación comenzaba la guerra psicológica a fin de justificar la agresión y convencer a la población de que semejante masacre, injerencia en los asuntos internos de Libia y el derrocamiento de Gadafi estaba justificado porque resulta que era un violador que, además, daba viagra a sus soldados para que violaran mujeres y eso se emitió en las televisiones.
Los montajes llegaron hasta el punto de mostrar las cámaras de tortura donde Gadafi violaba a mujeres y niñas. Si Gadafi era tan malvado ¿cómo occidente fue capaz de, conociendo esa información, hacer negocios con él, invitándole a visitar sus países?. Si la información sobre Gadafi es cierta nos queda claro que occidente no tiene moral y que pacta con cualquier tipo de criminal con dinero, guardando información para desprestigiar y dañar en caso de ser necesario a un potencial enemigo, pero si esta información es falsa, quedará claro que, como en el caso de las armas de destrucción masiva de Iraq y Sadam Husein, la información se falsea para justificar agresiones injustificables.
Después de la derrota de los Gadafistas, traicionados por la Comunidad Internacional que ayudó a los rebeldes, Libia quedó en manos de grupos terrorista como el Al Qaeda o Estado Islámico. Muamar el Gadafi fue interceptado mientras huía con su hijo por los mismos rebeldes que grabaron su asesinato, pero no fue un rebelde quién le mató.
ADVERTENCIA: ESTAS IMÁGENES PUEDEN HERIR SU SENSIBILIDAD
Se supo poco después que Muamar el Gadafi no fue ejecutado por un rebelde Libio sino por un agente del Servicio Secreto francés, enviado por el gobierno presidido por Nicolás Sarkozy. (Pincha aquí para obtener más información de esta noticia)
También se supo que el día anterior al asesinato de Muamar el Gadafi, Hillary Clinton (Secretaria de Estado de Estados Unidos desde 2009 hasta 2013) estuvo en Libia, durante una entrevista se referiría a su visita y al asesinato de Gadafí el día después con esta frase: Vinimos, vimos y él (Gadafi) murió.

Libia hoy

Libia a día de hoy es un estado fallido en manos de grupos terroristas como Estado Islámico, en manos de traficantes de droga que introducen la cocaína desde América Latina hasta Europa por la ruta del Sahel que acaba en Libia, es un país en manos de traficantes de personas que cada día envían desde las costas libias hasta Europa a cientos de personas provenientes del África negra y refugiados que huyen de Siria. 
Un país que siente años después es irreconocible, en manos de facciones tribales y de gobiernos que reclaman para sí el control de un estado inexistente. (Foto: Wikipedia Commons)

Fuente: Otra lectura

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