Es
admirable pero a la vez preocupante la utilización que se hace con la información
radial y televisiva. El ejemplo más ilustrativo es la información deportiva y
especialmente del futbol a nivel planetario, la cual ocupa una cantidad
ilimitada de tiempo en dar a conocer noticias relacionadas con equipos grandes
y pequeños, sus alineaciones, estrategias, lesionados, ruedas de prensa,
entrenamientos, concentraciones, los movimientos que tienen que ver con las
horas previas a los partidos y dependiendo de su importancia, todo el
despliegue publicitario generalmente de bancos, empresas financieras, cerveceras,
aseguradoras y cómo no empresas de telefonía; este tipo de encuentros concentran
la atención de un alto porcentaje de la población a nivel local, regional y
mundial.
Maravilloso,
sí, que se atienda con el futbol a la sociedad en la parte lúdica y de
recreación; pero esto se hace principalmente porque es un negocio que mueve
miles de millones y que promueve publicidad a transnacionales que juntas
acumulan grandes cantidades de capital y que lo recogen del mito consumista de
la población en general, desde la clase media alta en todas sus variables hasta
llegar a donde el bolsillo aguante.
La
recreación es un derecho, pero no se atiende con igual amplitud la información
que la sociedad debe recibir sobre otros derechos de mayor urgencia e
importancia como son: trabajo, salud, educación, vivienda, seguridad alimentaria
y medio ambiente sano. La difusión informativa en televisión y radio sobre
estos delicados temas es precaria y se da mayor cubrimiento en la parte social
a las noticias que generen en la población miedo y desconfianza; entonces se
cubren accidentes, homicidios, robos, asaltos,
incendios, misas y discursos de los pastores.
Lo
importante para el planeta y sus habitantes no se difunde, como por ejemplo
sobre las causas que contaminan los ríos y su ubicación, las causas de la erosión
y degradación de los suelos y su ubicación; cómo evitar y controlar estas
anomalías, qué métodos son los más adecuados para su control y cuáles no, por
qué la disminución del caudal de los ríos, cuáles son los más afectados o el
nivel de afectación de cada uno de ellos, el estado de la estructura y función
de las cuencas hidrográficas que alimentan los ríos que llevan el agua a los
acueductos municipales, para su conservación o su recuperación y restauración
necesarias. El estado actual de los ecosistemas y su nivel de degradación, cómo
se restauran y qué métodos emplear para ello.
Si
se tuviera información mundial de radio y televisión, de igual magnitud que la
del futbol, de un fenómeno de la importancia del ciclo del agua, el elemento más
importante para la vida del planeta, y del que Colombia posee las mayores
fuente de producción que son las tres cordilleras y las serranías bajas de la
altillanura, conocer los factores que influyen en la alteración de este ciclo,
cuál es papel de los bosques en la recepción, interceptación y filtración del
agua en el suelo, el papel del suelo en la retención y drenaje de ésta a
manantiales quebradas y ríos y su importancia ya citada en la alimentación de
los acueductos, qué incidencia en el ciclo tiene la escorrentía, la iluviación
y los niveles de agua vadósica, freática y de campo que respaldan la humedad
del suelo en las labores agrícolas. Si de esta información se encargaran los Estados
y fluyera a la población por medio de los Tics, se tendría conciencia de la
conservación, restauración y respeto por la naturaleza y sus leyes, y se
elaboraría el más adecuado ordenamiento planetario con la participación y para
beneficio de todos.
Si
en vez de los canales extranjeros que nos inundan de películas que presentan
crímenes de todos los matices y sevicias, robos, trampas, engaños, fantasmas de
ultratumba, guerras, bombardeos, destrucción de ciudades, poblaciones
exterminadas y catástrofes de todo tipo, se trasmitieran valores de
responsabilidad, respeto, altruismo, solidaridad, estudio, investigación,
creatividad y métodos adecuados del uso de los recursos se eliminaría
seguramente la violencia y se superaría la pobreza.
En
conclusión la información de la radio y televisión , es el desperdicio absoluto
del buen uso de estos medios en cosas que trasmitan el mensaje acertado para la
conformación de una ética social y de emplearla en la práctica para el buen uso de la naturaleza y
poder lograr revertir el modelo destructivo y contaminante actual, por uno de
producción limpia, seguridad alimentaria, basura cero, ordenamiento del
territorio en el contexto del manejo del ciclo del agua, como acertadamente lo
pretenden, para ejemplo del país y del mundo, la actual Alcaldía de Bogotá y su
Canal Capital.
Escribe:
Álvaro Corredor García
Ingeniero Forestal
Bogotá, Colombia
9 de octubre de 2013
-.o0o.-
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