------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Centenario del Socialismo Peruano (07)
Centenario del Socialismo Peruano (07)
NACIONALISMO
ÉTNICO
PANORAMA
ACTUAL
¿Qué
futuro le aguarda a nuestro país con el nacionalismo étnico? Como todos los
países de nuestra América Nativa, su población está compuesta de población
precolombina supérstite (incaica, preincaica, selvícola), de población criolla
(descendientes de hispanos y europeos), de población negra (afrodescendientes),
de población asiana (chinos y nipones mayormente) Y si bien la población nativa
es numerosa, cada vez más predomina el mestizo. Esta es la realidad actual.
Con
la conquista y coloniaje desapareció el Tawantinsuyu incaico, único Estado del
que se tiene noticias en el Hemisferio Sur antes de la expansión europea. Y
sólo quedó y queda hasta el presente su población aborigen, sometida primero a
la explotación feudal y luego de la Independencia a la explotación del Estado
“criollo”, del gamonalismo, de la burguesía parasitaria y rentista. Y así hasta
el presente.
Pero
la población indígena, originaria (quechua, aymara, mochica, otras) siempre ha
luchado por sus reivindicaciones. Sin embargo, “Todas las revueltas, todas las
tempestades del indio han sido ahogadas en sangre. A las reivindicaciones
desesperadas del indio les ha sido dada siempre una respuesta marcial. El
silencio de la puna ha guardado luego el trágico secreto de estas respuestas”,
señalaba a su tiempo JCM. ¿Por qué ocurría y ocurre esto hasta el presente?
Desde
su juventud JCM dedicó estudios y artículos a este tema. En la Bio-Bibliografía
de JCM (por Guillermo Rouillon) y en la COC de JCM están:
-Entre salvajes 19.07.14
-La fiesta de la Raza 12.10.14
-Grimas y zozobras (Rumimaki) 17.01.17
-Grimas y zozobras (Rumimaki) 13.02.17
-Grimas y zozobras (Rumimaki) 01.03.17
-Grimas y zozobras (Rumimaki) 25.04.13
-Día festivo (de la Raza) 13.10.17
-El problema primario del Perú 09.12.24
-Serpentinas (el pasado) 27.02.25
-El rostro y el alma del Tawantinsuyu bkiu 11.09.25
-Nacionalismo y vanguardismo 27.11.25
-Aspectos del problema indígena 17.12.26
-La civilización y el caballo 11.12.27
-El indigenismo en la literatura 04.02.27
-Indigenismo y socialismo (contra LAS) 25.02.27
-Indigenismo y socialismo (contra LAS) 11.03.27
-Indigenismo y socialismo (contra LAS) nn.03.27
-Presentación a Tempestad en los Andes nn.10.27
-Motivos de carnaval (el pasado) 24.02.28
-Contribución al Problema Indígena 12.08.28
-El indio y el mestizo 17.08.28
-El indio mestizo 24.08.28
-En el Día de la Raza 13.10.28
-Sobre el problema indígena 10.11.28
-Esquema del problema indígena nn.05.29
-Presentación a El Amauta Atusparia 05.03.30
|
Del
primero al último artículo, siempre su posición fue en defensa de la población
aborigen. Respecto a los selvícolas campas señala que “Por nada del mundo
sustituirían la rústica sencillez de su vida salvaje, por la inapacible y
violenta de las ciudades” Respecto a la rebelión de Atusparia señala que
“cuando la revuelta aspiró a transformarse en una revolución, se sintió
impotente por falta de fusiles, de programa y de doctrina”, y esto porque
“supérstites de una clase disuelta y vencida, los herederos de la antigua
aristocracia india, no podían acometer con éxito la empresa de una revolución”
En
torno al nacionalismo étnico hay dos aspectos. Respecto al Estado dominante,
“Esta crítica repudia y descalifica las diversas tesis que consideran la
cuestión como uno u otro de los siguientes criterios unilaterales y exclusivos:
administrativo, jurídico, étnico, moral, educacional, eclesiástico”; que “El
factor central del fenómeno es la hegemonía de la gran propiedad semifeudal en
la política y el mecanismo del Estado”, y que “Por consiguiente, es sobre este
factor sobre el que se debe actuar si se quiere atacar en su raíz un mal del
cual algunos se empeñan en no contemplar sino las expresiones episódicas o
subsidiarias”
Respecto
a la propia población aborigen, reitera una y otra vez que “Un pueblo de cuatro
millones de hombres, consciente de su número, no desespera nunca de su
porvenir. Los mismos cuatro millones de hombres, mientras no son sino una masa
inorgánica, una muchedumbre dispersa, son incapaces de decidir su rumbo
histórico” (Ahora somos hasta ocho veces más) Pero que “El indio alfabeto se
transforma en un explotador de su propia raza porque se pone al servicio del
gamonalismo”
Analizando
en conjunto estos aspectos, siempre centró en el problema primario, en el
problema raizal. Señala que “El régimen de propiedad de la tierra determina el
régimen político y administrativo de toda nación” Este tema lo desarrolló con
amplitud desde su histórico artículo El
problema primario del Perú. Por eso, en su Esquema del problema indígena, como resumen de sus planteamientos
señala que “Llamamos problema indígena a la explotación feudal de los nativos
en la gran propiedad agraria. El indio, en el 90% de los casos, no es un
proletario sino un siervo”; que “El capitalismo extranjero se sirve de la clase
feudal para explotar en su provecho estas masas campesinas”; que “Los elementos
feudales o burgueses, en nuestros países, sienten por los indios, como por los
negros y mulatos, el mismo desprecio de los imperialistas blancos”; que “Las
posibilidades de que el indio se eleve material e intelectualmente dependen del
cambio de las condiciones económico-sociales”; que “La evolución económica y
social de la nación entra en una era de actividad y contradicciones que, en el
plano ideológico, causa la aparición y desarrollo del pensamiento socialista”
De ahí concluye que “La lucha de los indios contra los gamonales ha estribado
invariablemente, en la defensa de sus tierras, contra la absorción y el
despojo. Existe, por tanto, una instintiva y profunda reivindicación indígena:
la reivindicación de la tierra” De ahí que “Dar un carácter organizado,
sistemático, definido, a esta reivindicación, es la tarea que tenemos el deber
de realizar activamente”
Esta
posición del Socialismo Peruano ante el problema primario de nuestro país fue
dejada de lado por décadas. Y por eso continuó el nacionalismo étnico con su
doble planteamiento. Primero, la restauración del Tawantinsuyu, ocultando que
es imposible volver atrás. Destruida hasta sus cimientos la organización
estatal, sólo queda la población aborigen en sus ayllus primigenios incluso ya
muy desnaturalizados. Por eso señala JCM que el indigenismo “no es una
especulación literaria ni un pasatiempo romántico que, como muchos otros, se
resuelve y agota en una inocua apología del Imperio de los Incas y sus faustos”;
que “los indigenistas revolucionarios, en lugar de un platónico amor al pasado
incaico, manifiestan una activa y concreta solidaridad con el indio de hoy”; y
-lo central-, que “Este indigenismo no sueña con utópicas restauraciones.
Siente el pasado como una raíz, pero no como un programa. Su concepción de la
historia y de sus fenómenos es realista y moderna. No ignora ninguno de los
hechos históricos que, en estos cuatro siglos, han modificado, con la realidad
del Perú, la realidad del mundo”
Segundo,
la superioridad de la raza, cayendo en un racismo al revés: “Del prejuicio de
la inferioridad de la raza indígena, empieza a pasarse al extremo opuesto: el
de que la creación de una nueva cultura americana será esencialmente obra de
las fuerzas raciales autóctonas”; pero “Suscribir esta tesis es caer en el más
ingenuo y absurdo misticismo” porque “Al racismo de los que desprecian al
indio, porque creen en la superioridad absoluta y permanente de la raza blanca,
sería insensato y peligroso oponer el racismo de los que superestiman al indio,
con la fe mesiánica en su misión como raza, en el renacimiento americano”
Han
pasado décadas, pero esta posición del Socialismo Peruano enfrenta nuevamente al
nacionalismo étnico en su doble aspecto. La candidatura primero y presidencia
después de Alejandro Toledo, que habla perfectamente el inglés pero ignora
perfectamente el runa simi, el quechua, comenzó con la “marcha de los cuatro
Suyus”, las cuatro regiones que constituían el Tawantinsuyu. Luego se supo que
esta campaña había sido sufragada provocadoramente por un magnate yanqui. Y
cuando llegó a la presidencia, durante su gestión flameó en la Casa de
Gobierno, Casa de Pizarro el Conquistador, la supuesta bandera del Tawantinsuyu
(la de los colores del Arco Iris) Pero ¿hizo algo
siquiera por restituir la tierra a sus paisanos aborígenes? Nada de eso,
simplemente cambió su Programa electoral por la Bitácora del gobierno
permanente.
Le
siguió en esta línea Ollanta Humala. Su bisabuelo había sido un déspota
terrateniente ayacuchano, que tuvo que huir de Oyolo en 1931, ante una revuelta
de indígenas hastiados de sus abusos. Por años su padre Isaac Humala, abogado
asesor de empresas constructoras, había trabajado por constituir un nuevo
movimiento étnico, el etnocacerismo (1989), en honor a Andrés A. Cáceres, héroe
de la resistencia en la infausta Guerra del Pacífico. Pretendía reivindicar la
“raza cobriza”
En
julio de 2009 se difundió una serie acerca de El color del Poder. Y se señaló que si aún sobrevive el viejo
nacionalismo es por la desorganización del pueblo trabajador, manipulado por
los medios de comunicación y desde el presente siglo maniatado por la
criminalización de la protesta popular. Así se seguía las vicisitudes del
nacionalismo étnico.
Ollanta
Humala, como militar y alumno de la repudiada Escuela de las Américas había
participado en la masacre de la insurrección senderista. Como candidato del
partido iniciado por su padre, prometió el “Conga no va”, proyecto minero
extractivista transnacional, pero apenas elegido le dio vía libre porque si la
tierra (el suelo) es de los campesinos, “el subsuelo es del Estado”. Repetía
así la doble jugada de un anterior candidato, que ante la terapia de shock
neoliberal repetía su “no shock, no shock”, pero apenas logró la presidencia
aplicó su “Fuji-shock” Y Ollanta Humala, apenas elegido cambió su electoral
Plan de Gobierno por la Hoja de Ruta del gobierno permanente.
Entonces,
ésta es la realidad del nacionalismo étnico, teoría y práctica. Y con este
nacionalismo, manipulado abierta y descaradamente por el sistema dominante
transnacional y marginal, el futuro de nuestro país es seguir siendo
políticamente independiente y económicamente colonial.
Por
eso, 7 Ensayos y Economía Colonial, ¡Siguen vigentes!
Ragarro
01.04.14
No hay comentarios:
Publicar un comentario