Quincena-07
SOCIALISMO
Y
PROLETARIADO
PERUANO
7 ENSAYOS DE INTERPRETACIÓN
DE LA REALIDAD PERUANA
ÍNDICE:
ADVERTENCIA
5; ESQUEMA DE LA EVOLUCIÓN ECONÓMICA,
I.- LA ECONOMÍA COLONIAL 7, II.- LAS BASES ECONÓMICAS DE LA REPÚBLICA
9, III.-
EL PERÍODO DEL GUANO Y DEL SALITRE 13, IV.- CARÁCTER DE NUESTRA
ECONOMÍA ACTUAL
15, V.- ECONOMÍA AGRARIA Y LATIFUNDISMO FEUDAL 19; EL PROBLEMA DEL
INDIO, SU NUEVO PLANTEAMIENTO 25, *SUMARIA REVISÓN
HISTÓRICA; EL PROBLEMA DE LA TIERRA,
EL PROBLEMA AGRARIO Y EL PROBLEMA DEL INDIO 33, COLONIALISMO =
FEUDALISMO 35,
LA POLÍTICA DEL COLONIAJE: DESPOBLACIÓN Y ESCLAVITUD 38, EL COLONIZADOR
ESPAÑOL
40, LA “COMUNIDAD” BAJO EL COLONIAJE 43, LA REVOLUCIÓN DE LA
INDEPENDENCIA Y LA
PROPIEDAD AGRARIA 45, POLÍTICA AGRARIA DE LA REPÚBLICA 48, LA GRAN
PROPIEDAD Y
EL PODER POLÍTICO 51, LA “COMUNIDAD” BAJO LA REPÚBLICA 54, LA
“COMUNIDAD” Y EL
LATIFUNDIO 60, EL RÉGIMEN DE TRABAJO – SERVIDUMBRE Y SALARIADO 63,
“COLONIALISMO” DE NUESTRA AGRICULTURA COSTEÑA 69, PROPOSICIONES FINALES
72; EL PROCESO DE LA INSTRUCCIÓN PÚBLICA,
LA HERENCIA COLONIAL Y LAS INFLUENCIAS FRANCESA Y NORTEAMERICANA 76, LA
REFORMA
UNIVERSITARIA, II IDEOLOGÍA Y REIVINDICACIONES 89, LA UNIVERSIDAD DE
LIMA 97, REFORMA
Y REACIÓN 100, III IDEOLOGÍAS EN CONTRASTE; EL FACTOR RELIGIOSO,
I LA RELIGIÓN DEL TAWANTINSUYU 119, II LA
CONQUISTA CATÓLICA 124, III LA INDEPENDENCIA Y LA IGLESIA 137; REGIONALISMO
Y CENTRALISMO, I PONENCIAS
BÁSICAS 143, REGIONALISMO Y GAMONALISMO 146, III LA REGIÓN EN LA
REPÚBLICA 150,
IV DESCENTRALIZACIÓN CENTRALISTA 154, V NUEVO REGIONALISMO 158, VI EL
PROBLEMA
DE LA CAPITAL 160; EL PROCESO DE LA
LITERATURA, I TESTIMONIO DE PARTE 169, II LA LITERATURA DE LA
COLONIA 172,
III EL COLONIALISMO SUPÉRSTITE 176, IV RICARDO PALMA, LIMA Y LA COLONIA
181, V
GONZÁLEZ PRADA 188, VI MELGAR 196, VII ABELARDO GAMARRA 198, VIII
CHOCANO 200,
IX RIVA AGÜERO Y SU INFLUENCIA. LA GENERACIÓN FUTURISTA 204, X COLÓNIDA
Y
VALDELOMAR 209, XI NUESTROS “INDEPENDENTISTAS” 216, XII EGUREN 218,
XIII
ALBERTO HIDALGO 226, XIV CÉSAR VALLEJO 230, XV ALBERTO GUILLÉN 237, XVI
MAGDA
PORTAL 242, XVII LAS CORRIENTES DE HOY. EL INDIGENISMO 246, XVIII
ALCIDES
SPELUCIN 260, XIX BALANCE PROVISORIO 262-264
BIBLIOTECA
“AMAUTA” LIMA, MCMXXVIII
Copyright
by Sociedad Editora “Amauta”
EDITORIAL
MINERVA, SAGÁSTEGUI 669, LIMA
268
Páginas, 17.4 x 24.5 cms
PORTADA
DE JULIA CODESIDO
(*Incorporado
desde la segunda edición)
Ich will keinen
Autor mehr lesen, dem man anmerkt, er
wolte ein Buch machen; sondern nur jene, deren Gedanken unversehens ein
Buch
wurden
Nietzsche,
Der
Wanderer und sein Schatten
A D V E R T E N C I A
Reúno en este libro, organizados y
anotados en siete ensayos, los escritos que he publicado en “Mundial” y
“Amauta” sobre algunos aspectos sustantivos de la realidad peruana.
Como “LA ESCENA CONTEMPORÁNEA”, no es éste, pues, un libro orgánico.
Mejor así. Mi trabajo se desenvuelve según el querer de Nietzsche, que
no amaba al autor contraído a la producción intencional, deliberada de
un libro, sino a aquel cuyos pensamientos formaban un libro espontánea
e inadvertidamente. Muchos proyectos de libro visitan mi vigilia; pero
sé por anticipado que sólo realizaré los que un imperioso mandato vital
me ordene. Mi pensamiento y mi vida constituyen una sola cosa, un único
proceso. Y si algún mérito espero y reclamo que me sea reconocido es el
de -también conforme un principio de Nietzsche- meter toda mi sangre en
mis ideas.
Pensé incluir en este volumen un
ensayo sobre la evolución política e ideológica del Perú. Mas, a medida
que avanzo en él, siento la necesidad de darle desarrollo y autonomía
en un libro aparte. El número de páginas de estos “7 Ensayos” me parece
ya excesivo, tanto que no me consiente completar algunos trabajos como
yo quisiera y debiera. Por otra parte, está bien que aparezcan antes
que mi nuevo ensayo. De este modo, el público que me lea se habrá
familiarizado oportunamente con los materiales y las ideas de mi
especulación política e ideológica.
Volveré a estos temas cuantas veces
me lo indique el curso de mi investigación y mi polémica. Talvez hay en
cada uno de estos ensayos el esquema, la intención de un libro
autónomo. Ninguno de estos ensayos está acabado: no lo estará mientras
yo viva y piense y tenga algo que añadir a lo por mí escrito, vivido y
pensado.
Toda esta labor no es sino una
contribución a la crítica socialista de los problemas y la historia del
Perú. No faltan quienes me suponen un europeizante, ajeno a los hechos
y a las cuestiones de mi país. Que mi obra se encargue de justificarme,
contra esta barata e interesada conjetura. He hecho en Europa mi mejor
aprendizaje. Y creo que no hay salvación para Indo-América sin la
ciencia y el pensamiento europeos u occidentales. Sarmiento que es
todavía uno de los creadores de la argentinidad, fue en su tiempo un
europeizante. No encontró mejor modo de ser un argentino.
Otra vez repito que no soy un crítico
imparcial y objetivo. Mis juicios se nutren de mis ideales, de mis
sentimientos, de mis pasiones. Tengo una declarada y enérgica ambición:
la de concurrir a la creación del socialismo peruano. Estoy lo más
lejos posible de la técnica profesoral y del espíritu universitario.
Es todo lo que debo advertir
lealmente al lector a la entrada de mi libro.
Lima 1928
José Carlos Mariátegui
|
XIX.-BALANCE
PROVISORIO
No
he tenido en esta sumarísima revisión de valores signos el propósito de
hacer
historia ni crónica. No he tenido siquiera el propósito de hacer
crítica,
dentro del concepto que limita la crítica al campo de la técnica
literaria. Me
he propuesto esbozar los lineamientos o los rasgos esenciales de
nuestra literatura.
He realizado un ensayo de interpretación de su espíritu; no la revisión
de sus
valores ni de sus episodios. Mi trabajo
pretende ser una teoría o una tesis y no un análisis. (…)
El
estudio de la
última generación, que constituye un fenómeno en pleno movimiento, en
actual
desarrollo, no puede aún ser efectuado con este mismo carácter de
balance.
Precisamente en nombre del revisionismo de los nuevos se instaura el
proceso de
la literatura nacional. En este proceso, como es lógico, se juzga el
pasado; o se juzga el presente. Sólo
sobre el pasado puede decir ya esta generación su última palabra. Los
nuevos,
que pertenecen más al porvenir que al presente, son en este proceso
jueces,
fiscales, abogados, testigos. Todo, menos acusados. Sería prematuro y
precario,
por otra parte, un cuadro de valores que pretendiese fijar lo que
existe en
potencia o en crecimiento.
La
nueva
generación señala ante todo la decadencia del “colonialismo” El
prestigio
espiritual y sentimental del Virreinato, celosa e interesadamente
cultivado por
sus herederos y su clientela, tramonta para siempre con esta
generación. Este
fenómeno literario e ideológico se presenta, naturalmente, como una faz
de un
fenómeno mucho más vasto. La generación de Riva Agüero realizó, en la
política
y en la literatura la última tentativa de salvar la colonia. Mas, como
es
demasiado evidente, el llamado “futurismo”, que no fue sino un
neo-civilismo,
está liquidado política y literariamente, por la fuga, la abdicación y
la
dispersión de sus corifeos.
En
la historia
de nuestra literaria, la Colonia termina
ahora. El Perú, hasta esta generación, no se había aún
independizado de la
Metrópoli. Algunos escritores habían sembrado ya los gérmenes de otras
influencias. González Prada, hace cuarenta años, desde la tribuna del
Ateneo,
invitando a la juventud intelectual de entonces a la revuelta contra
España, se
definió como el precursor de un período
de influencias cosmopolitas. En este siglo el modernismo
rubendariano nos
aportó, atenuado y contrastado por el colonialismo de la generación
“futurista”, algunos elementos de renovación estilística que
afrancesaron un
poco el tono de nuestra literatura. Y, luego la insurrección “colónida”
amotinó
contra el academicismo español -solemne pero precariamente restaurado
en Lima
con la instalación de una Academia correspondiente-, a la generación de
1915,
la primera que escuchó de veras la ya vieja admonición de González
Prada. Pero
todavía duraba lo fundamental del colonialismo: el prestigio
intelectual y
sentimental del virreinato. Había decaído la antigua forma; pero no
había
decaído igualmente el antiguo espíritu.
Hoy
la ruptura
es sustancial. El “indigenismo”, como hemos visto, está extirpando,
poco a
poco, desde sus raíces, el “colonialismo”. Y este impulso no procede
exclusivamente
de la sierra. Valdelomar, Falcón, criollos costeños, se cuentan -no
discutamos
el acierto de sus tentativas-, entre los que primero han vuelto sus
ojos a la
raza. Nos vienen, de fuera, al mismo tiempo, variadas tendencias
internacionalistas.
Nuestra literatura ha entrado en su período
de cosmopolitismo. En Lima, este cosmopolitismo se traduce, en la
imitación
entre otras cosas de no pocos corrosivos decadentismos occidentales y
en la
adopción de anárquicas modas finiseculares. Pero, bajo este flujo
precario, un nuevo sentimiento, una nueva revelación
se anuncia. Por los caminos universales, ecuménicos, que tanto se nos
reprochan,
nos vamos acercando cada vez más a nosotros mismos.
José Carlos
Mariátegui
Puede
observarse, en los énfasis agregados, que JCM resume las etapas
colonial,
cosmopolita, nacional, reafirmando su
teoría de la formación nacional.
Ramón
García Rodríguez
29.07.13