GERMAN CARO RIOS

GERMAN CARO RIOS..Por Diario UNO el enero 28, 2018

Las enseñanzas del maestro continúan vigentes y así lo recuerda la nueva y necesaria edición de su obra.

El maestro acompañado de alumnos y parte de la comunidad de Huayopampa.

Si la misión última de un maestro es transformar la sociedad en la que vive, Germán Caro Ríos es, con cada letra, un ejemplo. Si bien su historia es ya ampliamente conocida en el magisterio, vale recordarla al menos en resumen: natural de Huayopampa (Huaral), luego de educarse para ser profesor en Lima metropolitana, vuelve a su comunidad para sembrar el germen de la prosperidad aplicando en ella, desde (pero no limitado a) la educación escolar, una serie de teorías y nuevos conceptos que, a pesar del éxito, no han tenido la difusión merecida.

Precisamente, en afán de llenar ese vacío, “Sinco editores” presentará una nueva edición de “Las escuelas de estudio y trabajo en coeducación”, la obra en la que quedó plasmada toda aquella experiencia que, en estos momentos de replanteamientos dentro del magisterio, es necesario conocer.

Caro Ríos impulsó a los sectores populares en acciones transformadoras, lo hizo uniendo la escuela con la comunidad, organizando a los alumnos y a los padres y madres de familia; “convirtiendo a la Comunidad de Huayopampa en una colectividad próspera, productiva y cooperativa”, según señala Carlos Gallardo, discípulo de Caro Ríos así como fundador y dirigente del SUTEP.

“Don Germán laboró en la Escuela y en la Comunidad y también en el Sindicato, articulando y potenciando los esfuerzos individuales, convirtiéndolos en voluntad colectiva y organizada”, agrega en el prólogo de la presente edición.

Así, Caro Ríos logró cambiar para siempre a una pequeña porción del Perú, articulando la educación con su contexto y las necesidades del lugar, con una visión determinada, y no dejada al azar, como parece seguir ocurriendo en nuestro país.

PLANTEAMIENTOS

En palabras de Gallardo, los ejes de la pedagogía del amauta Caro Ríos son: el trabajo y la producción, la solidaridad, la comunidad, la equidad de género, entre otros. Lineamientos que son la aplicación, dentro y fuera de las aulas, de ideas de José Carlos Mariátegui.

“La Escuela, las aulas, eran un espacio grato, satisfactorio, donde se compartía, se laboraba en común, se materializaba el compañerismo.Don Germán hizo del sueño colectivista, de la utopía, algo concreto, tangible, realizable”, comenta Gallardo.

“En tiempos en que las concepciones patriarcales se imponían, en tiempos en que el pensamiento predominante privilegiaba la masculinidad y subordinaba la feminidad, cuando el pensamiento conservador y tradicional se escandalizaba de la propuesta de desarrollar los procesos pedagógicos en el aula uniendo a niños y niñas, y comentaba que al lado de las escuelas había que construir clínicas de maternidad porque el juntar a los hombrecitos y mujercitas era pecaminoso, era tabú; en esos tiempos Germán Caro Ríos con su propuesta de coeducación fue un pionero, un adelantado de lo que ahora se admite como normal, como correcto: la educación mixta, la coeducación, la educación de niños y niñas en las mismas condiciones y en los mismos espacios escolares”, agrega, señalando otra de las pruebas irrefutables de la vigencia de un educador que, nacido en 1905, vislumbraba ideas para el siglo XXI.