CUESTIONES DE FONDO

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CUESTIONES DE FONDO

(29 de enero de 2023)

Por Miguel Aragón

Buena tarde Edgar, repasemos algunos problemas de fondo del momento actual.

1.- Como en toda sociedad, la primera cuestión de fondo, es la contradicción entre el crecimiento de las fuerzas productivas y las relaciones de producción existentes.

Para no ir tan lejos, en los últimos 75 años, el país ha estado en dos ondas largas de crecimiento capitalista, que han chocado y continúan chocando con la superestructura del viejo estado feudal burgués.

2.- La segunda cuestión de fondo es la contradicción entre el crecimiento económico muy alto logrado en las últimas décadas y el mínimo o escaso desarrollo social.

La Renta Nacional (suma del capital variable más la plusvalía) ha crecido significativamente en los últimos años, pero la distribución de la renta se mantiene favoreciendo exclusivamente a un grupo muy reducido de personas.

Mientras continúe el crecimiento económico por encima de la tasa del crecimiento de la población, habrá un excedente por distribuir, y la lucha continuará siendo por la distribución de lo producido, por la distribución de la Renta Nacional, la lucha será por impulsar el desarrollo social. En estas condiciones de crecimiento económico la lucha continuará siendo una lucha por reformas democráticas, tal como se propusieron en el "Plan Bicentenario" en mayo de 2021.

Cuando el crecimiento económico pase a estar por debajo de la tasa de crecimiento de la población, no habrán excedentes para distribuir, y necesariamente la lucha principal pasará a ser por la dirección de la producción, la lucha pasará a ser una lucha directa por instaurar el nuevo poder. Actualmente todavía no vivimos en esas condiciones. Toda la literatura partidaria de los años 60 y 70, con su palabrería "izquierdista" superficial, sobre la inminencia de la revolución como "tarea inmediata", actualmente resulta totalmente absurda.

3,- La tercera cuestión de fondo, recién presentada en los últimos años, es la contradicción entre el ocasional gobierno democrático burgués iniciado en julio de 2021, y el viejo estado feudal burgués.

Los últimos gobiernos, de carácter gran burgués, han priorizado el crecimiento económico, descuidando el necesario desarrollo social. Es conocido que todo estado cumple una doble función, una función de dominio y una función de servicio. En las últimas décadas se ha priorizado lo primero, descuidando lo segundo.

Por el contrario, el gobierno democrático burgués iniciado en julio de 2021, con el presidente Pedro Castillo, tiene como función principal priorizar el desarrollo social, sin descuidar el necesario crecimiento económico ( se entiende el crecimiento económico capitalista, el único posible en las actuales condiciones).

En los primeros 16 meses del gobierno democrático burgués se ha conseguido continuar la recuperación económica después de la crisis coyuntural provocada por la pandemia. La tarea, en el segundo año de gestión de este gobierno era impulsar el desarrollo social. Las arcas fiscales están rebosantes de capital fresco, de grandes reservas, con bajo endeudamiento, con inflación controlada no obstante la crisis inflacionaria importada que está afectando a los países capitalistas desarrollados. Desde hace cinco años hay condiciones económicas favorables para priorizar la atención de las demandas sociales, pero la oposición política de la ultraderecha ha venido entrampando la atención de esta urgente necesidad.

El gobierno de Castillo, "desde arriba" no ha podido romper las trabas impuestas por el aparato estatal en todos sus niveles, tanto locales, provinciales, departamentales, como judiciales, congresales y militares. Hay una resistencia feroz a priorizar el desarrollo social, desarrollo que debe comenzar por atender las necesidades básicas en trabajo, educación y salud. Estas trabas solamente se pueden romper “desde abajo”, con la mayoría del pueblo organizada en gobiernos locales y gobiernos provinciales, gobiernos que impulsen la democracia participativa en desarrollo, en contraposición a la democracia representativa en decadencia.

Los municipios solo han invertido menos del 50% de los presupuestos asignados, no obstante las grandes necesidades insatisfechas de la mayoría de la población.

Las provincias más atrasadas y con mayores índices de pobreza, reclaman al gobierno central de Lima, pero no son capaces de impulsar sus propias gestiones de desarrollo. Mientras el pueblo no esté organizado localmente, subsistirá este gran problema, cuestión que no se resolverá en la capital. Actualmente, con las masas movilizándose y luchando en las calles estamos viviendo en un gran PROCESO PARTICIPATIVO.

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Atendiendo a tu inquietud, considero que estos son los tres primeros problemas de fondo, y en ellos está la raíz de los sucesos ocurridos el "7 de diciembre". Lo acontecido ese día, no es una cuestión superficial, ni se va a resolver mendigando "un adelanto de elecciones". Un probable adelanto de elecciones solamente serviría para legalizar el golpe de estado del 7 de diciembre, el golpe de la ultraderecha contra el gobierno del pueblo.

(Continuaremos)