-0-
TREDSA: Trabajo-Educación-Salud
MERITOCRACIA - EVALUACIÓN - NOMBRAMIENTO
La Dirección del Magisterio Nacional en su propósito de resolver la situación de paria de miles de educadores como consecuencia de los contratos temporales, convoco a más de doscientos cincuenta mil educadores a una evaluación con el objeto de lograr sus nombramientos y trabajen con tranquilidad y sin la zozobra y la amenaza de un despido y quedarse desempleado a la vista de un contrato temporal de trabajo, convertido por el Estado en una cadena que se abre y se cierra según el gusto de una plutocracia académica asentada en el poder, que poco o nada, tiene interés en la educación para el trabajo de los hijos de trabajadores y pueblo peruano en general.
El actual Ministro de Educación, tan atacado, desde su nombramiento como tal, por el odio de una ala de la oposición congresal desde la posición de la vieja política criolla, más enfrascada en el odio visceral superficial a una nueva política al servicio de un interés social, tan tibiamente -de otro modo no puede ser- intentado por el actual Gobierno, es la que en materia de educación levanta lo ya establecido por los anteriores y defenestrados gobiernos de turno blandiendo el canon feudal–burgués de la burocracia académica, anémica, de “la meritocracia” y en su nombre, sujeta a evaluaciones constantes los docentes por mediocres capataces como en el galpón feudal del “señor Estado”, caduco y corrupto.
No se hizo esperar las críticas a la evaluación que abre las puertas de nombramiento a los docentes aprobados en el examen por parte de la Dirección burocrática del “Colegio de Profesores del Perú”, fundado 2004, durante el gobierno de Alejandro Toledo (PP). Y no le falta razón, pues son 30 mil plazas docentes a ser cubierta por los nombramientos, lo que hasta ahora ha servido como “panacea” al amarillismo sindical, condicional a todo gobierno de turno y aplaudido por la acción reaccionaria, que a partir de la década del 90 del siglo pasado, se posesiono de la pírrica y superficial autonomía de las Universidades para convertirla, no solamente ajena, sino contraria a la realidad de un resurgimiento de la economía y producción nacionales.
En última instancia: meritocracia, evaluación permanente de los profesores, contratos temporales, colegiatura de los profesores, derrama magisterial, no han sido sino las armas empleadas por la acción reaccionaria para someter a los educadores a la vieja política del Estado y sus organizaciones reaccionarias. Y le ha rendido grandes provechos. El Sutep, ya no existe. Los educadores están dispersos y divididos y sometidos al ego del lema “primero son mis dientes que mis parientes”. Se sabe, que el ex Ministro de Trabajo, Iber Maraví, en su corta gestión, autorizo el registro actual del nuevo sindicato del Magisterio, FENATEP, cuya incursión en el escenario sindical en el magisterio se inicia el 2017, y que ahora disputa el consenso de la mayoría de los educadores conjuntamente con el otro sindicato, SUTEP (constituido el 6 de julio de 1972-Congreso Cusco), convertida después en una sucursal de un partido(Patria Roja) y adicta a todas las colaboraciones con los gobiernos de turno. En un terreno así, ocupa todo el espacio aquella degeneración burocrática del academicismo, acéfala, inútil, de grados y títulos, mediocres, que es peor que la ignorancia.
Lo que ocurre en el movimiento sindical del Magisterio, y esto no es una casualidad, ocurrió en su momento con el movimiento sindical en el proletariado peruano, la Confederación General de Trabajadores del Perú (CGTP), constituido el 17 de mayo de 1929, en vida del Amauta José Carlos Mariátegui, que enfrento dura lucha contra el Gobierno de Sánchez Cerro. En los años venideros, aquella central de los trabajadores se convertiría en agencia de un partido, el Partido Comunista Peruano (PCP). Dieciséis años después, el 1°de mayo de 1946, se fundaba la Confederación de Trabajadores del Perú (CTP), de filiación al partido APRA. De modo, que hoy en día, en materia de trabajo y sus beneficios sociales, la patronal dialoga tanto con la CTP como con la CGTP, y ambos son convidados asiduos a la casa de todos los Gobiernos de turno. Y se mantiene así, desde el interior del organismo de los trabajadores, la moral sanchopancesca tanto en el TRABAJO como en el de la EDUCACIÓN.
Los jóvenes educadores, manuales e intelectuales, continuadores en las luchas futuras en el trabajo como en la educación,
tienen la ardua tarea de poner de pie lo que hoy esta boca abajo en este viejo, obsoleto, sistema dominante que hunde al Perú. Para que eso suceda, se necesita la preparación de una organización renovadora, que construya sobre el cimiento solido de un programa, la reivindicación:
LA EDUCACIÓN PARA EL TRABAJO
Tener siempre presente lo que el Amauta José Carlos Mariátegui señalara: “Para afirmar ideas y hechos nuevos, hay que romper con las ideas y hechos viejos”. Esa es la vía única del Resurgimiento del Perú.
Héctor Félix D.
hector felix <hecfeldam56@yahoo.com>
20.11.21
COLECTIVO PERÚ INTEGRAL
23 de noviembre 2021
No hay comentarios:
Publicar un comentario