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- Es que por esas zonas vivieron los primeros hombres que habitaron la tierra. -Le aseguraron los lugareños.
- ¿Y es fácil llegar a esos lugares? -Inquirió el sabio.
- Rapayán está acá nomás, es el primer pueblo de Áncash que se alza sobre el Marañón y Tintash está por Huaycabamba, al frente de Llamellín. -Contestaron.
- Pero hay otro lugar mucho más importante don Santiago. -Terció un rudo bracero. -Se trata de Chavín que está al inicio de la cuenca del Puchca.
- Si, señor, allí existen edificios enterrados que sabe Dios que tesoros esconderán. -Sentenció otro tertulio dejando al sabio lleno de conjeturas.
- Oye, Julito, te has llevado el mérito de ser el descubridor de Chavín. -Le reclamaba en tono amical Antúnez de Mayolo.
- No es eso, Shanticho, yo solo desarrollé tus trabajos. Total, lo bueno es que en tu tierra está la partida de nacimiento del Perú -Contestaba muy risueño el doctor Tello.
Volviendo a nuestra tradición, en el
viaje que Antúnez de Mayolo realizó a mediados de 1915, estando en el
pueblo de Chavín, recogió el mito de Los Huaris, que narra la
creación del mundo según la versión de los antiguos habitantes de
nuestro suelo. Este mito lo escuchó Antúnez de Mayolo de un venerable
anciano, que en el quechua de Conchucos le relató lo siguiente:
“Al
principio, taita, solo existía el humo y la oscuridad era total,
indigna; y del humo surgió el mundo de arriba, el Hanan Patsa, con sus
celestiales moradores: el Taita Inti, con su cabellera dorada; la Mama
Quilla, su esposa, la de la sonrisa de plata; y sus hijas, las Koyllur,
alegres en su resplandor. También estaban, entre otros, el terrible
Illapa, el que refulge y brama; el colérico Shukuki, el viento fuerte; y
el altivo Turmanyé, siempre orgulloso de sus magníficos colores.
Del
humo brotó luego el Mundo del Medio, el Key Patsa. ¿Quiénes moraban en
él? Las grandes Cochas que serían las primeras pakarinas de los hombres;
los altos Orkos o Hirkas donde irían a morar los Auquis; los Rajus con
su albina vestimenta de donde incontenible brota el Yaku, fuente
primordial de la vida. Todo nació del humo. ¿Sería suficiente? Faltaba
más vida indudablemente.
Por último, del humo surgió el
Mundo de Adentro, el Uran Patsa, con sus increíbles habitantes. El Yacu
hirviente que todo lo consume; Los Kurus que destruyen cuanto tocan; la
Sachamama, la gran serpiente de las dos cabezas, con sus hijos los
amarus; los pequeños Ichik Ollko, con sus mágicos tambores, quienes con
el correr del tiempo conseguirían permiso para aparecer de cuando en
cuando en el Mundo del Medio. Finalmente, brotó una raza de gigantes
rojos y descomunales, de enormes colmillos, eran los Huaris; los hijos
del fuego que domina las entrañas del Uran Patsa.
Hubo una
época en que surgió una gran pelea entre el Mundo de Arriba y el Mundo
de Medio. Sería un primer Patsa Kuti, cuando se pierde la armonía y todo
se descontrola. En consecuencia, vino un gran terremoto, la gran cadena
granítica de los Andes se partió en dos con gran estruendo y conmoción,
formándose el sagrado valle del hoy llamado Callejón de Huaylas. Cuando
volvió la calma, por las grietas que se formaron en los Hirkas, los
Huaris curiosos y admirados, subieron al Mundo del Medio y se encantaron
al conocer una comarca tan bella, flanqueada por dos altísimas
cordilleras, una llena de blanquísimos nevados y la otra con durísimas
moles oscuras. Tan contentos estaban los Huaris, que decidieron quedarse
a morar en este mágico lugar.
Al tiempo, del Mundo de
Arriba cayó la Tamya como jamás se había visto; llovía inconteniblemente
día y noche. Tanto llovió que el valle sagrado donde vivían lo Huaris
se inundó completamente. Hubo huaycos y aluviones, fue un verdadero
diluvio. Ante este nuevo Patsa Kuti, los gigantescos Huaris, para salvar
su vida, emigraron muy temerosos y con premura al oriente, a poblar las
zonas trasandinas de Chavín, Marañón y Huacrachuco. No tuvieron en
cuenta que abandonaban la zona protegida por las mágicas Cordillera
Blanca y Negra.
Cuando los Huaris dejaron el valle sagrado
de Huaylas, el lugar de su aparición en el Kay Patsa, degeneraron
terriblemente. Espantados vieron como algunos se convirtieron en plantas
de todo tipo: árboles, arbustos y achupalla. Otros Huaris aullando de
impotencia viéronse transformados en animales voladores, rastreros y de
los que corren. Finalmente, cuando solo quedaba un grupo de ellos,
fueron convertidos en hombres de carne y hueso. Estos Nunas, estaban
desnudos y sintieron frío. Comprendiendo su situación, humildemente, los
hombres se aprestaron a poblar el Kay Patsa, la tierra; en sana armonía
con los seres que los rodeaban, plantas y animales; pues recordaban que
todos eran hermanos, hijos de la Patsamama frutos de un tronco común,
descendientes de los fabulosos Huaris”.
Santiago
Antúnez de Mayolo explicaba que los mitos cuentan bellamente la historia
de los pueblos y en este mito fundacional consideró que se encuentra la
explicación de cómo se creó el mundo desde la óptica del poblador
ancashino. Gustaba mucho de explicarlo y lo hacía con mucha paciencia.
- ¿Qué significado tiene el humo doctor? -Le preguntaban.
- Cuando en el mito se habla del humo, se habla del caos. En el Ande, si existe la dualidad caos – armonía que cíclicamente se alternan. El papel de los dioses es restablecer la armonía cuando llega el tiempo del caos, es por ello que se dice que los dioses andinos han sido dioses ordenadores, ponían orden sobre el caos; recién en tiempo de los Incas, al evolucionar la religión andina, se habla de dioses creadores.
- ¿Y que son los Patsa Kuti?
Los Patsa Kuti son los tiempos en que reina el caos. Así el primer Patsa Kuti fue de terremotos y el segundo, de aluviones; dos constantes en la historia del pueblo ancashino.
- ¿Hay otros ejemplos del caos en nuestra vida?
- ¡Claro! La muerte es un tiempo de caos; y el orden se reestablece luego de cinco días con el pitsqaki. El carnaval es otro tiempo de caos, que dura también cinco días, del sábado carnaval, al Miércoles de Ceniza donde se entierra a Ño Carnavalón. -Y adelantándose a su época sentenciaba: -Yo
no sé porque aún no existían investigaciones científicas sobre la teoría del
caos.
- ¿Y por qué en el mito se habal también del Callejón de Huaylas?
- El Callejón de Huaylas, es tomado como lugar sagrado por estar resguardado por la más grande expresión de la dualidad andina:
Las cordilleras Blanca y Negra. Mientras los Huaris moran en el Callejón de Huaylas, no les pasa nada; una vez que lo abandonan, la Tragedia se abate sobre ellos.
- ¿Y qué tiene de especial el Callejón de Huaylas?
- Es un estrecho valle artificial, formado gracias a la presencia de la Cordillera Negra. Esta es una Cordillera única; es un regalo de Dios.
-Es un apéndice de la Cordillera Occidental, nace en Conococha y muere en Macate. Gracias a la Cordillera Negra existe la Cordillera Blanca, porque la primera permite que la nieve se acumule en la segunda al contener los vientos que vienen del mar.
Concluía don Santiago aseverando que la transformación de los Huaris a
todo tipo de seres vivientes, incluidos los seres humanos; es para los
hombres, una clara señal que no debemos sentirnos superiores a nadie.
-De
aquí parte la concepción holística del hombre andino y la conciencia de
que todos los seres vivos son sus hermanos. -Concluía don Santiago
demostrando toda su sapiencia.
José Antonio Salazar Mejía
jasm_440@hotmail.com
Fuente: https://www.chiquianmarka.com/la-creacioacuten-del-mundo.html
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