PUENTE DE LA PERLA, QUE BONITO PUENTE

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PUENTE DE LA PERLA, QUE BONITO PUENTE

“Puente de La Perla, que bonito puente”, así se pasaba de boca en boca una bella canción andina en los poblados del Valle de Añasmayo. Como un sinnúmero de sentimientos que anda atravesando los corazones del valle, se desconoce el autor de aquel sentimiento hecho música y que no hace sino recordar el nacimiento del amor del joven o de la joven que pasaron el puente de La Perla sin reparar que sus abrazos sean de Rauma, de Huandaro, de Sumbilca, de La Perla, de Pallac o de Huayopampa. El misterio del amor lo puede todo y mueve montañas. Es la historia vivida, real, de este testimonio cálido y cristalino como las aguas de nuestros puquiales.

Hoy, aquel puente de eucaliptos y barro, de los suspiros poblanos sinceros, se viste modernamente, según la época que impone sus realizaciones. Se rehace de concreto. No se vanagloria de su fortaleza moderna en el tiempo porque más le interesa su fortalece espiritual, solidaria, condescendiente entre el varón y la mujer, que unidos los dos, hacen resurgir todo el encanto de la vida en el valle de Añasmayo.

Y para completar la sinfonía armónica se verá acompañada de la pista por donde al lado del correr del “carrito pasajerito” ira el pasajero o pasajera que elevara la calidad del trabajo y la calidad de la producción agrícola de las tierras, ganadería, y demás actividades aburridas de ciudad subirán a nuestros campos a aflojar sus nervios desgatados en la bulliciosa ciudad.

No hay mejor homenaje practico, útil, al factor humano del valle de Añasamayo, pedacito de cielo del Perú al pie del orbe.

Y continuemos cantando con pasión, “Puente de La Perla, que bonito puente”, como que mi compañera es de La Perla Chaupis, y tuve que cruzar de la otra banda por el puente de La Perla en esta vida pasajera, pero de eterna luna de miel.

¡SALUD! Queridos pueblos de los Distritos de Atavillos Bajo y Sumbilca.

Héctor Félix D.

07.08.22