Cuando
el Amauta José Carlos Mariátegui en su dialogo polémico con Luis
Alberto Sánchez de 03.03.1927 (Polémica Finita-COC. T.13-pag.227),
señalaba que “Una obra finalmente, se juzga, por sus elementos
positivos, creadores, esenciales, afirmativos”, evidentemente estaba
refiriéndose a la realidad profunda, y seguidamente la resaltaba como
“Este es siempre el juicio de la historia”. El presente del Socialismo
Peruano es el testimonio concreto de esta verdad. Luego, en el mismo
pasaje afirmaba, “Pertenece al espíritu pequeño burgués de los críticos
orgánicamente individualistas, secesionistas y centrífugos, el juicio
-muy criollo o limeño tal vez-, de juzgar una obra por sus elementos
pasivos, subsidiarios, formales o episódicos”, evidentemente estaba
refiriéndose a la realidad superficial. Y esta es otra verdad del
presente de los figurines y figurones de turno.
La Realidad Superficial.
Como
en las anteriores elecciones y la que va en camino ahora hacia el 2016,
podemos apreciar que la realidad superficial del Perú como un problema
de gobierno, se renueva en los partidos y movimientos que lo expresan,
ya como derecha o como izquierda. Esto es evidente. Como una ilustración
se ofrece la candidatura de la coalición de un sector de la Izquierda
democrática como Partido Democracia Directa, integrado por el Bloque
Nacional Popular, Democracia Directa, Ciudadanos por el Cambio, Partido
Comunista Peruano, Fuerza Social, Patria Roja, Únete. Su Plan de
Gobierno elevado a Programa enarbola el postulado:
-Una reforma política jurídica del país
-Salarios justos
-Nuevo modelo de desarrollo económico
-Contra la corrupción
-contra la economía ilegal, etc., etc.
Allí
los tienen, clara como el agua cristalina, juzgando los problemas
peruanos por sus “elementos pasivos, subsidiarios, formales o
episódicos”, explotado como única cantera de donde pueden extraer todo
el promeserismo de ayer, de hoy y de siempre. Siempre serán los mismos
con las mismas y apellidos propios: de derecha o de izquierda. Su meta:
la reforma del Estado y la conservación del Sistema dominante.
La Realidad Profunda.
El Socialismo Peruano, que juzga la obra de sus antecesores y
continuadores “por sus elementos positivos, creadores, esenciales,
afirmativos”, que conducen a la Liberación de las fuerzas productivas,
propone: El nuevo Municipio de triple integración:
Producción-Administración-Gobierno, como célula económica de un nuevo
tipo de Estado comuna. Su Programa Mínimo Reivindicativo -Programa
Prospectivo o Programa Máximo-. No son programas para ganar elecciones,
sino para el Cambio Social, para el cambio de sistema. Desde este punto
de vista, se pone lo más lejos posible de los intereses políticos
actualmente en juego. Y si participa tal como se concibe las elecciones
hoy, es solo para usarlo como tribuna de agitación y propaganda
clasistas.
El Socialismo Peruano lo tiene todo, solo le falta: LA PREPARACIÓN DE LA ORGANIZACIÓN, y
esta es su meta inmediata hacia un Perú Integral. Los activistas que se
reclaman del socialismo peruano, tienen el deber imponderable de meter
toda su sangre en aquella idea.
HFD.
15.10.15
No hay comentarios:
Publicar un comentario